¿Por qué no existe democracia en España?
El concepto de representación requiere cumplir los siguientes puntos:
- La representación consiste en el derecho otorgado unipersonalmente para la toma de decisiones.
- La representación puede ser revocada en cualquier momento.
- Los representantes no tienen más derechos que los representados.
Los ácratas, siendo contrarios al poder absoluto del grupo frente al individuo por medios violentos, únicos detractores de la violencia, podremos considerar esta democracia, este poder absoluto del pueblo, completamente detestable. No obstante, para los que vemos escalas de grises, es evidente que sigue siendo una forma de violencia levemente legítima por cuestiones evolutivas. Por desgracia, tampoco tenemos esta forma de violencia; tenemos algo peor.
¿Qué puede ser peor que la violencia de la mayoría frente al individuo? La violencia de la minoría.
Para analizar el sistema "político" actual vamos a comparar un sistema teórico con nuestro sistema de gobierno. Imaginemos un sistema hipotético donde:
- El Estado posee una rama de administración interna llamada sistema de partidos.
- Para acceder a dicha administración no es necesaria una oposición sino que se accede con la militancia y creación de grupos de opinión internos.
- El grupo de opinión dominante posee un líder, sujeto único de sufragio pasivo.
- El pueblo elige entre los diferentes "elegibles", supongamos que sean 4 o 5 sujetos posibles por elección quienes, en función al sistema de reparto, tienen derecho a rellenar las cámaras de poder político a su discreción.
- Esas cámaras legislan positivamente y dichas leyes se hacen cumplir con otros órganos del Estado directamente dependientes de ellos.
A priori, llamaremos a este sistema "oligarquía de partidos". Analicemos diferentes críticas a esta analogía e intentemos refutar que nuestro sistema sea equivalente al mostrado:
- Los partidos políticos no son órganos del Estado. Al menos según las deliberaciones del Tribunal Constitucional. Curiosamente también observan que "no siendo poderes públicos ejercen, sin embargo, funciones públicas". Son entes financiados desde el Estado, con poderes directos en el ejercicio del funcionamiento del Estado. El puritanismo en la definición de poder estatal choca con la laxitud de la definición de democracia, de modo que permítanme sintetizar la frase anterior como poder del Estado
- Su funcionamiento interno "democrático" y su financiación estatal no son impedimentos para ser democráticos. Como tampoco lo sería la existencia de un partido único bajo esas premisas. La elección entre miembros de dos familias de autócratas o entre miembros de una sola no implica poder político real del ciudadano
- El "pater familias" tiene gran poder dentro del órgano del partido por los privilegios aportados por el Estado a dichos partidos
- Los distintos partidos ya poseen poderes y privilegios superiores a otros sujetos físicos y jurídicos y en lugar de luchar por dichos privilegios, sólo disputan cuotas de poder entre ellos. Los líderes distribuyen esos privilegios en función de las distintas intrigas familiares y afinidades personales
- La clase gobernante y sus afines poseen el monopolio de la violencia, siendo imposible rescindir el contrato social existente en modo alguno.
Pasemos rápidamente a las críticas más evidentes que se pueden realizar a esta comparación:
-Tonterías. En cualquier momento los ciudadanos pueden desmontar el sistema.También es posible tumbar cualquier sistema autocrático si la mayoría se rebela. El ejercicio de la violencia física no es necesario para el mantenimiento de sistemas sin representación, como la historia demuestra ampliamente. En el pasado, el poder se legitimaba por otros medios (véase derechos divinos), mientras que actualmente se mantiene de manera mucho más inteligente mediante un sistema de libertades. El sistema de libertades consiste en convencer que el gobierno es legítimo porque se ejerce un derecho a deponer al poder, por el posible surgimiento formal de nuevos poderes y por la presencia de amplias libertades individuales mientras estas no amenacen al poder. Empezando por la posibilidad de deponer el poder, ya que éste es del mismo sistema de partidos. Cambiar de partido no depone el poder en modo alguno, antes al contrario, lo legitima de cara a la población como una coronación papal. Sobre la posibilidad del surgimiento formal de nuevas aristocracias poderosas, alguna de las cuales incluso podría cambiar el sistema, no solo siempre ha existido como posible intriga palaciega, sino que de facto se ha demostrado igual de improbable. Los poderes del Estado otorgan financiación y poderes de comunicación, generando barreras de entrada al "mercado de poder", el desmantelamiento del sistema requiere el dominio absoluto del mercado, operando en sentido contrario a la mayoría de mercados, donde el dominio se adquiere con el cambio. Finalmente, se cae en el infantilismo de esperar que tras la adquisición de privilegios se renunciará a ellos voluntariamente. Por último, poseemos un sistema de libertades tal que existen mientras éstas no amenacen al propio sistema. No eres libre de irte al monte, fundar tu comuna anarquista autogestionaria y convertirte en la ciudad-Estado más próspera del país. Si no quieres financiar a un político, tu alternativa es un proceso penal. Si no quieres inculcar la moral del sistema en tu entorno, la alternativa es la pérdida de custodia. Cualquier acción que tienda a quitar poder al Estado está penalmente perseguida, expresión civilizada de la violencia ejercida por un poder extraño.
-Este sistema es lo que ahora se llama democracia y es ampliamente reconocido.
Falacia ecológica. En la era moderna el pensamiento era otro y no por ello acertado. Democracia es lo que es. Demos+kratos es el poder absoluto de los ciudadanos, por lo que llamar democracia a este sistema implica identificar Demos y Estado. Si a esto se le llama ahora democracia, podemos llamar al concepto original poder real del ciudadano, pero mantendré mi fijación con la pureza del término en todo el texto.
-Solo haces una crítica, no ofreces alternativas.
No las ofrezco directamente porque actualmente se ve nuestro sistema como democracia legítima y es necesario decir que no es un sistema de gobierno legítimo. Los sistemas democráticos han sido escrupulosamente definidos en la literatura, pero haré un pobre retrato. Como ácrata, asumir que el individuo se vea sometido al poder absoluto de la mayoría sin posibilidad de retractarse del sistema me parece un fin ilegítimo, pero hagamos un juego de rol:
- Los ciudadanos (todo adulto) tienen su parte de poder en sí mismos. Aquí nos encontramos con dos visiones del mundo donde es posible la existencia de un regulador a largo plazo (legislativo) y un gobernante a corto plazo (ejecutivo):
- Minarquías. Por economías de escala, pero sin renunciar a principios éticos fundamentales, los ciudadanos podrán delegar su toma de decisiones en otros ciudadanos, quienes decidirán de forma asamblearia las decisiones públicas. ¿No es operativo, con las herramientas tecnológicas actuales, que haya decenas de miles de representantes decidiendo en común cuestiones sobre las que no tienen por qué tener conocimientos? Sí lo es cuando dichas decisiones son importantes para los individuos y no existen estructuras que gobiernen con privilegios.
- Representación por circunscripciones idénticas en población. Cada pocos ciudadanos se elige un único representante de distrito cuyo salario y único poder surge del mismo distrito. La libre circulación de personas permitirá que todo aquel disconforme con su comunidad pueda cambiar de comunidad (sin despreciar los costes asociados)
- Los poderes públicos poseen total y absoluta independencia entre sí. ¿Cómo se consigue dicha independencia? Jurados populares y jueces de carrera. Si un jurado popular desconoce el funcionamiento de las leyes (labor del juez) y falla contra la misma, cabrá siempre recurso, pero las leyes positivas NUNCA pueden ir contra la decisión jurídica de la sociedad, por lo que la "modificación social del derecho" es imperativa. Poder legislativo y ejecutivo pueden reprobarse en cualquier momento mutuamente e, inmediatamente tras la reprobación, se convocan elecciones a ambos poderes.
-Tus propuestas no están exentas de problemas, se parecen a EE.UU. y mira sus problemas
No siendo siquiera mis propuestas, EE.UU. posee el sistema a gran escala más cercano al citado, del mismo modo que yo soy el miembro de mi familia más cercano a Milán, pero a unas dos horas en avión. La democracia representativa real nunca será mejor que la sociedad que la compone y todo sistema asimétrico de poder automáticamente será corrompido. Es la vigilancia de los ciudadanos sobre sus derechos individuales reales la que será garante del correcto funcionamiento de su representación. Dicha vigilancia será más activa cuando los derechos sean reales, del mismo modo que es infinitamente mayor la productividad en la explotación de un bien propio frente a un bien de capital ajeno: es la naturaleza humana. El Estado no es el pueblo, es otra entidad superior, por lo que controlar fuertemente sus privilegios y no caer en la absurda identificación ciudadanía-Estado dependerá de la sociedad, pero una vez se parta de la verdadera libertad, la degeneración ya caerá en responsabilidad de la sociedad misma y no de las oligarquías gobernantes.
-Nuestro sistema es lo mejor que se ha podido hacer
Y es por ello que debemos cambiarlo a mejor. La naturaleza es salvaje, no ética. La evolución natural no es moralmente buena, sólo es eficiente. Las organizaciones de grandes sociedades han pasado por tiranía, oligarquía y ya nos toca caer en la oclocracia. Busquemos la democracia y caigamos si la sociedad así lo quiere en oclocracia, será un sistema de gobierno mucho más ineficiente, pero la justicia moral no entiende de eficiencias. La libertad es el primer punto de cualquier sistema moral que pueda considerar aceptable, defender la libertad a cualquier precio es un imperativo ético, la libertad con hambre nunca ha sido elegida frente a la servidumbre opulosa, pero la tecnología nos ha hecho más libres, los avances tecnológicos nos seguirán alejando de las necesidades de subsistencia, por lo que la eficiencia del sistema podrá ser olvidada por la libertad política colectiva, porque nadie es libre si todos no son libres.
Si no buscas la libertad política colectiva, no eres demócrata.
La defensa de libertades individuales es subsidiaria a la libertad de los sujetos de derecho. Si una sociedad con libertad real cae en el principio de agresión por ser mayoría contra las minorías (e.g. impedir el matrimonio homosexual) sin considerar que, roto ese principio, éste se volverá en su contra, la democracia será inmoral pero legítimamente inmoral en cuanto a los principios democráticos. Actualmente, la ausencia de democracia hace que la existencia o no de ciertas libertades quede a la arbitrariedad de los oligarcas, por lo que cae en un segundo plano cualquier otra lucha frente a la de la búsqueda de la democracia. Si no buscas la libertad, los que buscamos la libertad para todos debemos considerarnos ajenos a tus luchas vacías y, del mismo modo que lucharemos contra los que rompan nuestra libertad por un lado, lo haremos contra lo liberticidas de cualquier ideología.
Caminemos hacia la democracia para seguir luchando por la libertad.