Real World Post´s telegraph: Ciudad destruida por un ataque nuclear. Suburbios terroristas del exterior atacan el Mundo. Rebelión sofocada con la eliminación de la mitad de la población que sustentaba a los asesinos en sus poblados.
-¡Cuántos grises veo a nuestro alrededor! Repulsivo. Y pensar que hace sólo unos pocos años nadie había oído hablar de ellos siquiera… Resulta descorazonador verlos andar por las calles de las ciudades del Mundo Real (son incapaces de considerar reales a las miles de personas que siguen en las mismas condiciones que hace un siglo), con sus corbatas iguales, sus trajes fotocopiados y sus rostros clonados. Avanzan como una fila de hormigas siguiendo las feromonas del dinero y portando una carga más de ochenta veces su peso, la carga del ochenta por ciento de la población mundial que subsiste gracias al sistema que les permite ser ellos mismos, ser Grises.
No todo el mundo puede ser Gris. Es necesario nacer dentro del 2% adecuado. Una vez ahí se necesita no tener ninguna anomalía genética en tu familia que te permita pensar. Y ya todo sigue su curso. Desde tu más tierna infancia comienzas tu formación espartana. No necesitas más armas que tu pluma montblanc ni más compañero de fatigas que tu portátil. Pero es necesaria la disciplina militar, el no dudar a la hora de retirar el seguro a un moribundo, de salvar a un rico mafioso de la cárcel o de experimentar en poblaciones pobres por todo el mundo.
Ningún Gris tendría la ocurrencia de incumplir la ley. Simplemente no podría tener ocurrencia alguna, el margen de la ley de la plata es mucho más ancho, el negocio de la droga es para ignorantes que no saben que el presupuesto de cualquier estado es una mejor inversión.
Desprecio todo en ellos. Su imagen camaleónica, sus barrigas ocultas por un buen entrenador y su tejido gris casi inexistente.
-Creo que has nacido en el siglo equivocado, cariño
-Quizás en el milenio equivocado.
-Deberíamos anular la boda, no quiero casarme de blanco yendo tú de negro, correríamos el riesgo de tener un hijo Gris.
-No solo la boda, hay que dejarlo todo.
-Empecemos por dejar el Mundo Real como realmente tendría que estar.
-Um, te quiero, ¿sabes?
-Yo también. Pulsa el detonador antes de irte.