No hay luna hoy en el cielo,
la única luz, del fuego,
y los únicos ruidos, los hacemos.
El mar suena tranquilo
no sé que me susurraste al oído,
pero ya estoy en el agua
y jugamos con tu vestido:
que no quieres quitártelo,
pero que quieres bañarte conmigo,
que sólo con un beso,
que sólo la arena sea testigo.
No os preocupéis por la canción, hay que escucharla entera antes de hablar:
Leer más...
la única luz, del fuego,
y los únicos ruidos, los hacemos.
El mar suena tranquilo
no sé que me susurraste al oído,
pero ya estoy en el agua
y jugamos con tu vestido:
que no quieres quitártelo,
pero que quieres bañarte conmigo,
que sólo con un beso,
que sólo la arena sea testigo.
No os preocupéis por la canción, hay que escucharla entera antes de hablar: